sábado, 3 de marzo de 2012

Las primeras mujeres colonas en Gualaquiza.-1818



Es interesante anotar que el citado oficio que hemos transcrito, se menciona que en las colonias amenazadas por los jíbaros, existen dos mujeres, una que se ha casado ya con un jíbaro cristiano; y otra que se dedicado a la instrucción y enseñanza de la doctrina cristiana, el idioma castellano, y más ocupaciones mujeriles  a las niñas párvulas de los jíbaros.

            Tal vez algún día encontremos el nombre de estas dos valientes y buenas mujeres que fueron las primeras en llegar de colonas a Gualaquiza .

            Estas mujeres de seguro sirvieron de ejemplo a Mercedes Molina que les precedió luego, en la misión de catequizar a los nativos en estas agrestes y para entonces peligrosas selvas de Gualaquiza.FDA




Oficio a los Ministros Oficiales de la Real Hacienda.


 Oficio a los Ministros Oficiales de la Real Hacienda.




Al  presente caso, según lo representan el Teniente y  un sacerdote que se hallan en las misiones nuevas de la Provincia de Logroño, es de las más graves, y su prevención y reparo en tiempo oportuno de la más urgente necesidad, que no da lugar a dilación, admite consultar ni aguarda sus resoluciones; muy conforme con la humana piedad, la cristiana religión, la recta razón y los intereses de la Iglesia, el Estado y la Patria que preponderan a toda ley positiva que dispusiere lo contrario, en contraposición o derogación de lo que resuelve terminantemente lo conveniente y de las recientes elogiadas y aprobados ejemplares que tenemos en él, en que no va menos que la vida, obediencia, y respeto de nuestro teniente que representa en su clase al Rey, al mismo tiempo que es el interprete único que hay en esta provincia, que entienda y hable el idioma de los jibaros, y el órgano con que se les ha comunicado hasta aquí la fe y sumisión al Soberano y debe prometerse  se comunique a los que restan hasta la completa reducción de aquella provincia. La vida de un párroco, padre y pastor, no solo de aquellos neófitos, sino también de la de varios españoles que ya han pasado a poblares allí, entre los cuales también el honor de dos buenas mujeres, la una que se casó ya con un jíbaro cristiano, y la otra que se ha tomado a su cargo la instrucción y enseñanza, de la doctrina, idioma castellano y ocupaciones mujeriles a las niñas párvulas de los jíbaros.


            El escándalo de los propios jíbaros ya catequizados; retraimiento de los demás que están en disposición de ello, y su desconfianza en el favor y seguridad que ha nombre de su Majestad se les ha prometido, el retraso o acaso imposibilidad, si no es a mucho costo y trabajo de la propagación de la religión en aquellas provincias; y, últimamente la retracción de los varios otros pobladores que con este objeto se habían incitado, y tienen tomados sus asientos en aquellos parajes, de que deban comprenderse al primer golpe a la reflexión los indecibles perjuicios que deben seguirse a otros Estado o Religión de estas provincias, y de que sean Ustedes responsables en caso de insistir en negarse a dar de su parte los auxilios que tengo pedidos por mi anterior, en razón del dinero que importase el subplus de la tropa que diese este Señor Comandante, y la contribución de las armas que se refieren de cuya  importancia pasaré a ustedes oportunamente la correspondiente razón.

Y en cuanto al asunto de los mil pesos que por orden del Excelentísimo Sr. Virrey del reino tengo recibido para la empresa de la continuación de la reducción de dichos jíbaros, tengo elevada ya la cuenta documentada de su inversión a otro Sr. Excelentísimo, y su aprobación, y reintegrado el alcance que hago en ella. Tengo en caso de que se dilate, o Ustedes consideren, ser de su inspección su reconocimiento, no tengo inconveniente en pasársela también.
Dios guarde a Ustedes muchos años

Cuenca diciembre ocho de mil ochocientos diez y ocho

Juan López Tormaleo.



 De los oficios transcritos en este Boletín, podemos deducir que el Gobernador Interino Juan López Tormaleo, viendo la urgente necesidad de dar oportuno auxilio a su teniente, al párroco, a los jíbaros catequizados y a los pobladores españoles asentados ya tanto en Gualaquiza como en Bomboiza, efectivamente dispuso y logró enviar la ayuda solicitada. Esto deducimos por cuanto la insipiente colonia se logró mantener pese a la agresividad de los nativos especialmente de Zamora, hasta el año 1.820

.
El Gobernador Juan López Tormaleo, remitió oficio a los Señores Ministros de la Real Hacienda, acompañando testimonios  escritos de José Suero y Manuel Mogrovejo, teniente y cura de la colonia; insistiendo en su pedido de que se pague a la tropa que va en auxilio, y las armas blancas fabricadas para este efecto.

Hace responsable a los Ministros de Hacienda, el retardo o consecuencias  que pueden devenir si se pierde la vida y la colonia misma de la provincia llamada en ese entonces de Logroño. Púes los señores Ministros de Hacienda, insistían por su parte se de las cuentas de los mil pesos invertidos en la reducción y expedición hecha a Gualaquiza, más 500 pesos  adicionales; dinero entregado al Sr. Teniente de Gobernador, e intérprete de la expedición José María Suero.

            En tanto se sucedían estos dramas en la colonia de Gualaquiza y Bomboiza; en Cuenca y la región sonaban ya los clarines de libertad, lo que exasperaba más al Gobierno Español para ya no gastar o invertir un solo peso más en la reducción de los jíbaros.

Para 1820 al parecer fue insostenible las colonias en Gualaquiza y Bomboiza; pues se sabe que las tribus jíbaras de Zamora cayeron sobre ellas  irremediablemente, lo que ocasiono la precipitada fuga de los españoles, colonos y especialmente jíbaros ya catequizados como lo fue el famoso Pinchopata y otros, que por salvar su vida salieron también a Cuenca, en donde encontraron se batallaba por la independencia, sabiéndose que Pinchopata y los suyos combatió en Verdeloma, al lado de  los patriotas  .FDA

GUALAQUIZA 1818


1.818



Oficio que envía de Gualaquiza y Bomboiza el Teniente de Gobernador

JOSÉ MARIA SUERO y el Capellán Dr. Manuel Mogrovejo al Gobernador Interino de Cuenca D. Juan López Tormaleo  solicitando auxilio de soldados y armas.



Usía no ignora el carácter bárbaro de los jibaros, y como han vivido siempre matándose entre ellos, lo que actualmente quieren verificar con nosotros y los deste pueblo, los vecinos inmediatos de Zamora, sin otro motivo que haberse muerto una criatura, dicen que ellos no han padecido males, y que nosotros somos los que traemos, que ellos no quieren morir con males, por lo que no gustan nuestra permanencia; y están actualmente convocándose para sepultarnos en ruina, de lo que hemos tenido noticia por uno que secretamente nos reveló, y hemos confirmado con otros que nos han prevenido no estemos descuidados, que así conviene porque tenemos artos enemigos . Lo que se nos ha hecho preciso participar a Usía  para que vea modo de patrocinarnos remitiendo de pronto unos seis hombres armados, no para perjudicarlos, sino es para defendernos, pues es mucha barbarie estar con la muerte a los ojos sin fuerzas para resistir, que si no fuera interés propio el mío el adelantamiento de esta Misión, saldría ya del modo posible, más mi fin es no desamparar en caso que tenga algún auxilio, de lo contrario me veré obligado a salir, lo que Usía no debe extrañar... Usía sabe más, que en un caso tan apurado como este que va la causa de la Religión, del Rey en cuyo nombre se ha dado principio a esta Conquista, y del adelantamiento de la Patria, puede Usía dar auxilio de pronto; sin, participar al Excelentísimo Sr. Presidente para hacerlo después, quién presumo no solo aprobara sino hará que existan estos cuatro o seis soldados que vengan hasta que se póble esto de gente, que entonces ya no serán necesarios. 

                                               Los jibaros de este nuevo pueblo, y neófitos claman por dicho auxilio por tratarse de viles, siendo cuantioso el número de los que amagan.-

Dios guarde a Usía muchos años.– San José de Bomboiza, Noviembre veinte y seis de mil ochocientos diez y ocho—Beso la mano de Usía en afecto–

             Capellán Manuel Mogrovejo.



Señor Licenciado Don Juan López Tormaleo, Teniente General Asesor del Gobierno, Gobernador Intendente Interino y Oidor de la Real Audiencia de Quito.– Usía no ignora el carácter bárbaro de los jíbaros, púes no piensan más que en matar `para hacerse temidos y respetados entre ellos...a cuya consecuencia siempre se ha necesitado de un resguardo, y se necesita en todo tiempo, púes aún en los pueblos católicos se tiene un respeto para no dejarse atropellar, esto supuesto me parece más burla que conquista pues no tenemos como defendernos, en un caso de que ocurra como en el actual que estamos amenazados sin motivo, solo por haberse muerto una criatura ... y amenazan a todos los que están preparados a abrazar nuestra Santa religión, por lo que todos los de este Pueblo unánimes claman por un auxilio pronto, para defenderse de los de Zamora; y, piden con ansia, deseando hacer ver que su majestad ampara a sus Vasallos con el respeto de sus fuerzas, mediando a esto que se les ha ofrecido defenderlos cuando se hallen en la actual situación, para lo que Usía puede mandar unos cuatro o seis hombres armados y unas cuatro lanzas o sables para otros que me acompañan actualmente, todo lo que se pide es nada, y si esto no se consigue no estamos en el estado que los Apóstoles predicaron, y uno ama la vida, a más a esto el Soberano tiene puesto a sus Ministros… para el adelantamiento de la Religión y el Estado . Usía, si tuviese por conveniente dando auxilio, puede participar al Excelentísimo Sr. Presidente que me parece aprobará.– Dios guarde a Usía muchos años. Bomboiza y Noviembre veinte y seis de mil ochocientos diez y ocho. José María Suero.




Otro Oficio de José M. Suero.-(del mismo día).
Señor Teniente Asesor, Gobernador Interino y Oidor de la real Audiencia de Quito, Don Juan López Tormaleo .– Bomboiza.-Noviembre veinte y seis  de mil ochocientos diez y ocho.-

Muy Señor mío de mi atención. Se me hace preciso participar a Usía que unos de Zamora están para asaltarnos a todos los cristianos y no cristianos, y esperamos que Usía  nos auxilie siquiera con unos cuatro fusileros y mandarnos unas armas blancas como sables o lanzas por lo pronto que pide Pinchopata, Tendecha, Guicama y los más, pues nos acometen y estamos esperando el golpe, y si Usía no manda quedamos avergonzados, y ellos verán que no tenemos pronto auxilio cuando necesitamos, y harán lo que quieren, esto es provocar, esto es una..., una bajeza, un desprecio aún a la Religión– Usía trate con el Doctor Villavicencio y verá  si se necesita respeto ó no .
 Estos están fervorosos, y no desagradados de seguir nuestra Ley; en este estado Usía disponga lo que le parezca, que Yo con botar esto se acabarán las zozobras que a pesar del deseo que tengo me he de ver obligado a hacerlo.– Espero contestación y resolución sin pérdida de tiempo, para ver de mi vida que he de hacer, púes no hay hombre contra dos, el Doctor Mogrovejo ya iba a salir  y lo contenido haciendo esta diligencia-

Dese Usía buena salud, y mande a su más atento que besa su mano-  José María Suero.


Nueve días demoró al parecer, estos oficios  en llegar a las manos del Gobernador, quién el día  5 de diciembre providencia al respecto lo siguiente:

Cuenca diciembre cinco del ochocientos diez y ocho.-

Recibidos; y, resultando de ellos no solo el eminente riesgo de la vida con que hallan los cristianos pacificadores pobladores y neófitos de las Misiones de Bomboiza y Gualaquiza, sino también el de perderse todo la que hasta aquí ha avanzado anteriormente… asunto sin esperanza de recuperarse después sino a fuerza de muchísimos gastos, tiempo y dificultades acaso insuperables en detrimento gravísimo de la Religión y del estado: A fin de que se precava en tiempo, contribúyanse los auxilios que se piden y á el efecto sépase por de pronto con el correspondiente testimonio oficio al Señor Comandante de esta Plaza para que se sirva dar el de seis hombres y un Cabo con las correspondientes armas y pertrechos; e igual a los señores Ministros de real Hacienda, que se sirva de libramiento en forma para el pago de los correspondientes sueldos y armas que se han de trabajar y comprar; entre tanto que los Excelentísimos Señores Virrey del reino y Presidente de Quito, se dignen tomar  la más oportuna providencia para la manutención de las Misiones y demás que se establezcan, a cuyo fin se les dirigirá también con los correspondientes testimonios, las respectivas representaciones.-

Licenciado Tormaleo.-



Ante mi .– León de la Piedra.– Escribano
                  Publico de Cabildo y Real Hacienda.
AH/BC.-Archivo de Historia del Banco Central –Cuenca.

La Historia y la Geografía relacionado a Gualaquiza-.


                                                La Historia y la Geografía.                      Dr. F. Durán A.



Para comprender  la historia hay que  conocer la geografía  pues estas dos ciencias  van de la mano .
            Nuestra historia  desde su inicio  ha sido ha sido hija única, que ha carecido de sus hermanas especialmente de la mayor, la geografía.

            Un ejemplo, “historiadores” afirman que  destruida Logroño de los Caballeros por la furia de los nativos, cayeron al  siguiente día con sus ataques sobre la ciudad de Sevilla de Oro, como si los furiosos nativos  estuviesen a pocos kilómetros de una ciudad y otra. Geográficamente sabemos hoy que de Logroño a Sevilla de Oro o Macas, están de por medio muchos Km. Imposible de recorrerlos en medio de la selva y  de la noche a la mañana. Esto sucede por el desconocimiento total de la geografía nacional.

            Si un historiador  no conoce  por ejemplo la ubicación del  río Cuyes; el valle del Cuy viejo, el río Bomboiza etc. es imposible que se dé cuenta  real de la ubicación de  una ciudad fundada por españoles; y  sostenga que presumiblemente estuvo en un lugar muy apartado del sitio geográficamente  preciso.

            La historia tiene sus auxiliares  imprescindibles; hoy como nunca uno de estos auxiliares es la arqueología, está a su vez la antropología, ciencias que no pueden  prescindirse una de otra.

            La historia cuenta que cerca de la ciudad de Sevilla  de Oro, fundada por los españoles, se construyeron sendos castillos de defensa para contener a los  valientes jíbaros; estos castillos de defensa construidos no por manos españolas, sino por sacrificados indios de la sierra traídos como esclavos; y, dirigidos por españoles que entendían de fortificaciones.”… “Del mismo modo dejaron de la mano el progreso de  conquista y dejaron arruinar dos castillos o fortalezas  que había, el uno en San Antonio y los demás u otro, que no me aseguran su nombre con los cuales impedían la entrada a los infieles, en mucha parte…”    Antonio Gortaire y Goyeneche .– Quiteño.-Teniente de Milicias y Gobernador de Macas en  1784 .

            Pasan  trescientos años, llegan los arqueólogos desconociendo la historia, encuentran estas ruinas; y, lo primero que identifican son construcciones pre-hispanas, de culturas aborígenes ligadas al formativo; ven en estas ruinas lo que su mente y psiquis quiere ver, un jaguar copulando sexualmente con un ser humano.             Desconociendo los arqueólogos la existencia de las fortalezas españolas construidas por los indios, los cuales naturalmente  y durante todo el tiempo que duró la construcción de estas fortalezas y su permanencia en ellas, usaban de su cerámica utilitaria  como ollas, vasos, etc. traídas de sus parcialidades serranas, o aledañas  a estas fortalezas, cerámica que ha servido para que los arqueólogos desconociendo la historia presuman  la existencia de una cultura  prehispánica.

            Vienen otros arqueólogos y con una simple explicación lógica desmoronan esta teoría con la que no comparten, y dicen que solo desde el aire, actualmente se pudiera ver lo afirmado por el anterior arqueólogo; y que en tiempos supuestos de la construcción de estas tolas (castillos de defensa) no había forma de que los constructores viesen desde el aire lo que estaban supuestamente construyendo.

            Si se conociera la historia y la geografía a la par del acontecimiento pudieran darse cuenta que lo encontrado y estudiado son ruinas de las fortalezas de defensa  construidas por los españoles en el siglo 17.–